127.

    En la revista "Viento Sur" nos han encargado una reseña mensual, y a cambio nos han enviado una lista descomunal de obras para elegir. Una propuesta para ponerse la botas, vamos, o las gafas más bien. Lo más difícil es escoger, porque son tantas las novedades que abruman, incluso eliminando aquellas que te despiertan menos interés. Hay demasiados libros buenos que leer, más que longanizas o días, y por supuesto gente que los escribe con un tacto y un criterio que te dejan perplejo, documentándose durante años para ser exhaustivos y decir cosas inteligentes y bien razonadas que luego casi nadie considera, aunque solo sea para llevarles la contraria con el mismo o parecido rigor. 

   No es ningún secreto que el debate público es una auténtica basura, y no porque no haya datos o talento a espuertas, como para exportar, sino porque el experto, que ha llegado a serlo gracias a una larga labor de investigación y reflexión, tiene fama de aburrido, mientras que el tertuliano de saldo que no sabe ni de qué está hablando por lo visto conecta más con ese ente misterioso al que llaman "las audiencias", cuando en realidad lo que nos están llamando es idiotas a la cara. Así de sencillo, y lo demás son excusas, chácharas, sofística más o menos sofisticada para convencernos de que el pensador digno de ese nombre no nos conviene y que en cambio los cobratas de corbata de dudosa procedencia nos van a hacer una síntesis perfecta y libérrima del mogollón, apta para espectadores adocenados como usted. Por eso la democracia es mala en el fondo, porque la gente está alelada y necesita que la conduzcan como a ganado. A ese argumento acaban llegando siempre. No entienden, no están formados, no tienen esa capacidad, así que vamos a ponerles un macho alfa que los guíe y solo alfalfa intelectual para rumiar... Pajas mentales y forraje barato para poder seguir forrándonos.

   Ahora estoy con "¿La rebeldía se volvió de derechas?", un ensayo de Pablo Stefanoni en el que se pregunta lo que el título indica y trata de contestarlo. Probablemente sí, o al menos en apariencia, y de ahí que un individuo como Trump haya podido llegar a la Casa Blanca. Ser transgresor es ser de derechas en estos tiempos, el más políticamente incorrecto del foro anónimo y etc., y en su minucioso estudio Stefanoni acaba llegando a toda una serie de teóricos y blogueros del alt-right que son los que alimentan a gran escala toda esta farsa - hay espacios en internet de este pelaje con más de 750 millones de visitas mensuales, toma audiencia - y que en última instancia no proponen más que vislumbres delirantes y justificados a veces hasta por las costumbres de las langostas, tal cual. Ciudades-estado que funcionarían como empresas dirigidas por un rey CEO que daría incentivos al personal para que se quedasen allí y no se fuesen a otra, en una especie de versión platónica de Mad Max en la que los derechos políticos, que son algo contraproducente y corrupto, serían suprimidos para dejar únicamente los derechos individuales, que al parecer no están relacionados con los anteriores y además sabemos de buena tinta que el generoso y magnánimo rey CEO no los iba a suprimir también después, por la sencilla razón de que... Bueno, que no iba a hacerlo, maldito progre, y vete a Cuba o a La Habana Inorporated S.A si no te gusta... Ese es el plan más o menos cuando tiras del hilo, y por eso dan el coñazo con que no les dejan decir "coñazo" las feministas, que igual a mí tampoco pero ya lo he superado, tíos, y sin necesidad de esconderme detrás de un nick... Esta es la espontánea y lúcida rebeldía de los arios de ahora: pijadas como para caerse de culo escritas por frustrados que no ligan porque cualquiera los aguanta con esas paranoias, y no porque exista un complot sexista, y que han venido para sustituir con su frescura y su viril originalidad siglos de filosofía, de literatura, del mejor pensamiento humano que con todas sus imperfecciones o imposturas, que las tiene, cómo no, ya se ha olido vuestras mierdas a kilómetros de distancia... Pero como no lo echan por la tele pues no os habéis enterado todavía, que mucha audiencia pero luego no escucháis más que bobadas... Y no porque seáis tontos, sino porque para poder elegir con verdadera libertad primero te tienen que enseñar toda la lista.